Definitivamente me han roto el corazón varias veces, creo que desde la primaria me pasaba porque era muy enamoradizo y noviero, obviamente, con el paso del tiempo, iba doliendo más, no era lo mismo que te lo rompieran en primaria a secundaria y mucho menos en prepa y ya ni se diga en una etapa mas adulta.
Días tristes, llorando, cantando a todo pulmón con los amigos las canciones de Hombres G, pasando por su casa 700 veces para ver si la veías con otro y si si, la típica reacción de querer golpear y matarlo, cosa que nunca pasaba, nada mas era hacer alarde. Y pues si, yo pensaba que eso era que te rompieran el corazón, algo que te duraba unos días y llegaba otra nueva novia y te lo quitaba… iluso de mi.
Soy papá de 4 hijos, 3 de mi primer matrimonio y 1 de mi actual. La mayor es una niña de 20 años y ya está en la universidad, con ella sufrí, pero no porque ella me hiciera o dijera algo, mas bien sufrí con ella, sus caídas, que le rompieran el corazón, y muchas cosas que no eran hacía mi o al menos no era yo el que más sufría. Ah! Pero no contaba con que venía el que tiene actualmente 19 años, el primer de los varones, ese, ese si me ha hecho ver mi suerte.
Las novias te rompían el corazón, y la mayoría de las veces, sabían que te lo rompían, es mas, se me hace que a veces hasta lo planeaban, o al menos decían, “pues le va a doler pero tengo que terminar con el”. Lo hijos adolescentes, en la mayoría de los casos, ni siquiera se dan cuenta que te lo rompen, que curioso no?, el dolor más fuerte puede venir de alguien que ni siquiera está pensando en causarte ese dolor, a lo mejor si lo supieran tendrían un poquito más de cuidado con lo que dicen o hacen.
Mi hijo entró en una etapa en su vida de tristeza, tristeza que, dice él, ni él mismo sabía qué tenía, pero que era andar triste, serio, todos en la mesa riendo o contando cosas y él volteándonos a ver con una cara seria o de que le aburríamos. Varias pláticas tuve con él y el resultado era el mismo, “no tengo nada papá” o “no se que tengo pero estoy bien”.
Un dia, por una actitud de esas de siempre, ya no pude más y me puse a darle un recital, acabé llorando en la mesa diciéndole que si el proeblema era yo, que no importaba, que se fuera con su mamá y que no volviera a verme si eso lo hacía feliz, que estaba dispuesto a no verlo si eso le iba a dar la verdadera felicidad, que si era gay, que si le hacían bullyng, que si eradrogadicto, alcoholico o estuviera pasando por cualquier situación que le pudiera dar pena platicar y se sintiera atrapado que me lo dijera, que mi amor estaba sobre cualquier cosa, a lo que obviamente contestó que no, que no era eso. Después de eso solo me subí a encerrarme en el closet y a llorar como loco, y ahi, justo ahi, conocí lo que es que te rompan el corazón de verdad, lo de las novias pasadas parecía una tontería comparado con esto y es que este tipo de llanto y de sentimiento no es de dolor que te hacen a tí, si no que es un llanto por el dolor de ver a un ser tan amado y que no lo puedes ni sabes ayudar. Dolor que te atormenta al pensar que qué has hecho mal, que todo lo que le has dado, en todos los sentidos, no ha servido para nada, que eres un mal padre, que has criado a un hijo infeliz y eso es muy doloroso como padre que realmente ama a un hijo y no, este no se va cantando canciones de Hombres G ni dejando pasar los días, ni ver la felicidad en otros hijos lo alivia.
Después de un tiempo de misma situaciones las cosas se calmaron, no se si fue el cambio de escuela, si fue el madurar de parte de él o siemplemente era algo pasajero, pero creo que volvió a la normalidad. Cosa que también me ha costado trabajo, porque al yo ser alguien tan extrovertido, que no me callo nada, activo, etc, pensaba que mi hijo, al no ser como yo, le pasaba algo o tenía algo mal, lo medía con base a la única medida que tenía disponible y ese era yo. No porque fuera mejor o peor que yo, si no porque pensaba que su forma de actuar, al ser mi hijo, debería de ser semejante. El tiempo y él me han ido enseñando que no, que no tiene mi carácter y que para ser feliz tampoco tiene que ser ni actuar igual que yo. Que el tiene su propia forma de ser feliz y tiene su propia personalidad. No puedo negar que me ha sido sumamente dificil entender todo esto, más, porque siempre tendré la duda si realmente es feliz y sí, ya se que la felicidad, a partir de cierta edad, depende de cada quien, pero siempre me ha dado pabor no haber sido una buena escuela para mis hijos, no haber sembrado correctamente para que alcancen su plenitud como adultos y sean personas de bien y felices. Despues escuchando tantas noticias de suicidios de personas que se suponían vivían una vida plena y de la nada comenten ese acto mas vuelta te da la cabeza. Supongo que solamente el tiempo lo dirá.
Sigo peleando conmigo y con él, a veces de forma frontal y a veces solo en mi cabeza. Ya se fue también a estudiar a otra ciudad y menos lo puedo ver para comprobar cómo está, solo me queda creer que está bien como me lo dice y que si llegara a necesitar realmente mi ayuda la pedirá. Me sigue costando trabajo el tener pláticas sencillas, sin ir más allá, me sigue costando trabajo el no poder sentirlo como yo supongo que se debería de sentir alguien feliz, pero otra vez tengo que recordar que simple y sencillamente no puede ser como yo y que que bueno que así sea.
El corazón? El corazón sigue roto, no se si igual o un poco menos, pero creo que también es cuestión de trabajarlo todos los días y esperar lo mejor y que al ver a mi hijo en un futuro pueda descansar al comprobar que sí, que realmente todo estaba bien.
Y tu que creías que hoy te iba a contar cosas de desamor no?
Aqui te dejo esto… por si te sirve
